jueves, 12 de junio de 2008

trabajo de mapa mental

REPUBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELAMINISTERIO DEL PODER POPULAR PARA LA DEFENSAUNIVERSIDAD NACIONAL EXPERIMENTAL DE LAS FUERZAS ARMADAS(UNEFA)NUCLEO LOS TEQUES: EDO MIRANDA







INTEGRANTES GRUPO 1
Figueroa B, Raúl E CI 12.731.026
Miguel J, Gómez R CI 12.955.133
Rubén A, Palacios G CI 15.118.433
Márquez Z, Judith Y CI 16.589.561


Profesor(a): Herminia Arindia
Materia: Autogestión
Ing. Sistema – Noche
Sección: 10
Blog: grupo1seccion10noche





EL ORIGEN DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
El término Inteligencia Emocional se refiere a la capacidad humana de sentir, entender, controlar y modificar estados emocionales en uno mismo y en los demás. Inteligencia emocional no es ahogar las emociones, sino dirigirlas y equilibrarlas.

El concepto de Inteligencia Emocional, aunque esté de actualidad, tiene a nuestro parecer un claro precursor en el concepto de Inteligencia Social del psicólogo Edward Thorndike (1920) quien la definió como "la habilidad para comprender y dirigir a los hombres y mujeres, muchachos y muchachas, y actuar sabiamente en las relaciones humanas".

Para Thorndike, además de la inteligencia social, existen también otros dos tipos de inteligencias: la abstracta –habilidad para manejar ideas- y la mecánica- habilidad para entender y manejar objetos-.


Un ilustre antecedente cercano de la Inteligencia Emocional lo constituye la teoría de ‘las inteligencias múltiples’ del Dr. Howard Gardner, de la Universidad de Harvard, quien plantea ("Frames of Mind", 1983) que las personas tenemos 7 tipos de inteligencia que nos relacionan con el mundo. A grandes rasgos, estas inteligencias son:

Inteligencia Lingüística: Es la inteligencia relacionada con nuestra capacidad verbal, con el lenguaje y con las palabras.

Inteligencia Lógica: Tiene que ver con el desarrollo de pensamiento abstracto, con la precisión y la organización a través de pautas o secuencias.

Inteligencia Musical: Se relaciona directamente con las habilidades musicales y ritmos.

Inteligencia Visual - Espacial: La capacidad para integrar elementos, percibirlos y ordenarlos en el espacio, y poder establecer relaciones de tipo metafórico entre ellos.

Inteligencia Kinestésica: Abarca todo lo relacionado con el movimiento tanto corporal como el de los objetos, y los reflejos.

Inteligencia Interpersonal: Implica la capacidad de establecer relaciones con otras personas.

Inteligencia Intrapersonal: Se refiere al conocimiento de uno mismo y todos los procesos relacionados, como autoconfianza y automotivación.

Esta teoría introdujo dos tipos de inteligencias muy relacionadas con la competencia social, y hasta cierto punto emocional: la Inteligencia Interpersonal y la Inteligencia Intrapersonal. Gardner definió a ambas como sigue:
"La Inteligencia Interpersonal se construye a partir de una capacidad nuclear para sentir distinciones entre los demás: en particular, contrastes en sus estados de ánimo, temperamentos, motivaciones e intenciones. En formas más avanzadas, esta inteligencia permite a un adulto hábil leer las intenciones y deseos de los demás, aunque se hayan ocultado... "

Y a la Inteligencia Intrapersonal como "el conocimiento de los aspectos internos de una persona: el acceso a la propia vida emocional, a la propia gama de sentimientos, la capacidad de efectuar discriminaciones entre las emociones y finalmente ponerles un nombre y recurrir a ellas como un medio de interpretar y orientar la propia conducta..."


LA APARICIÓN DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
En 1990, dos psicólogos norteamericanos, el Dr. Peter Salovey y el Dr. John Mayer, acuñaron un término cuya fama futura era difícil de imaginar. Ese término es ‘inteligencia emocional’.

Hoy, a casi diez años de esa ‘presentación en sociedad’, pocas personas de los ambientes culturales, académicos o empresariales ignoran el término o su significado. Y esto se debe, fundamentalmente, al trabajo de Daniel Goleman, investigador y periodista del New York Times, quien llevó el tema al centro de la atención en todo el mundo, a través de su obra ‘La Inteligencia Emocional’ (1995).

El nuevo concepto, investigado a fondo en esta obra y en otras que se sucedieron con vertiginosa rapidez, irrumpe con inusitado vigor y hace tambalear las categorías establecidas a propósito de interpretar la conducta humana (y por ende de las ciencias) que durante siglos se han dedicado a desentrañarla: llámense Psicología, Educación, Sociología, Antropología, u otras.
INTELIGENCIA EMOCIONAL: SINÓNIMO DE MADUREZ
La violencia provocada por los jóvenes norteamericanos preocupa y hay quienes se están preguntando qué es lo que está fallando en la crianza de los niños en este país.
Mientras que los comunicadores culpan a los juegos de video y la televisión, los educadores a la falta de orientación cívica y moral en las escuelas, los sicólogos apuntan hacia un aspecto fundamental del desarrollo de la personalidad.
Antes lo llamaban madurez, pero ahora es calificado de inteligencia emocional y hasta existen pruebas que miden el coeficiente emocional (EQ).
"Estamos criando un montón de niños sin disciplina por ideas mal entendidas de dejar al niño hacer lo que quiera", afirma María C. Fernández, psicóloga de la Universidad de Miami que labora en el Mailman Center for Child Development.
A su juicio, la forma ideal de desarrollar la Inteligencia Emocional es mediante la crianza en el hogar en el que los padres logren hacerlo con un equilibrio del amor y la disciplina.
"Uno trata de que el niño se desarrolle emocionalmente y que sea feliz en la vida, son cosas básicas y normales", apunta la experta en sicología infantil. "Para lograr el desarrollo del niño es indispensable el amor y la disciplina. Los dos tienen que ir de la mano".
Otros hasta discuten si la Inteligencia Emocional es un potencial innato o si constituye un grupo de habilidades, competencias, o destrezas que se aprenden.
También hay especialistas que afirman que, al igual que ocurre con todos los otros tipos de inteligencia, existen aspectos de desarrollo en el aprendizaje de cómo utilizar esta inteligencia. Y la habilidad de usarla varía de situación a situación y de día a día.
Según investigaciones recientes, los niños con una Inteligencia Emocional alta aprenden mejor, tienen menos problemas de conducta, se sienten mejor sobre sí mismos, tienen mayor facilidad de resistir las presiones de sus contemporáneos, son menos violentos y tienen más empatía, a la vez que resuelven mejor los conflictos.
Otras características de los niños emocionalmente inteligentes es que tienen menos probabilidades den recurrir a una conducta autodestructiva, (como drogas, alcohol, embarazo adolescente), tienen más amigos, gozan de mayor capacidad para controlar los impulsos y son más felices, saludables y exitosos.
"La inteligencia emocional es lo que antes se llamaba sabiduría, o madurez, o instinto social", explica la psicóloga Gilda Moreno, del Miami Children Hospital. "Es poder desarrollarse bien dentro de su ambiente de una manera inteligente, porque la vida es un equilibrio, y si uno tiene ese balance emocional es más fácil alcanzar la felicidad".
Los padres deben entender "que a los niños hay que hablarles mucho, y hoy día nadie les está hablando", excepto la televisión, Internet y los amigos.
Lo más indispensable, asegura Moreno, es que los padres mantengan una buena comunicación con sus hijos.
"Si uno no deja que los niños hablen, no sabemos qué lo que están pensando. No hablarles en tono de sermón, pero sí en un tono de que los adultos podemos ayudarlos a encontrar su propia manera de pensar".







La inteligencia emocional cobra validez en la actualidad cuando se asumen cambios de paradigmas. Anteriormente se tendía a considerar la inteligencia como un factor exclusivamente intelectual totalmente desprendido de emoción. Recientemente surge la tendencia a considerar diferentes tipos de "inteligencias", entre ellas la emocional.
Desde esta nueva perspectiva, si antes se consideraba inteligente una persona porque podía desprenderse de la presión de sus emociones, ahora se comprende que es deseable aprender a administrar nuestras emociones de manera inteligente.
Cada vez es más aceptado que la capacidad de motivarse y perseverar pese a las dificultades y frustraciones, el administrar los impulsos y la capacidad de posponer una satisfacción personal, el ser capaces de regular el humor y de impedir que se alteren las facultades de razonamiento, además de la empatía y la esperanza son factores esenciales para alcanzar el éxito y la felicidad.
Podemos reconocer la inteligencia emocional porque nos pone en contacto con lo que hay de humano en una persona, y para facilitarle entrar en contacto con la suya le ofrecemos a continuación una serie de preguntas que, al contestarlas y evaluar sus respuestas, le permitirán conocer un poco más sobre su mundo emocional y como se desenvuelve usted en él.

LA INTELIGENCIA Y LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
Desde siempre hemos oido que el C.I. era determinante para saber si una persona tendría éxito en la vida, un test podría marcar el futuro de su éxito académico y profesional. Sin embargo, hace ya varios años que desde el ámbito empresarial se dieron cuenta de que son otras capacidades las necesarias para el éxito en la vida. Y esas no las medía ningún test de inteligencia.
Piense por un momento la importancia que las emociones tienen en nuestra vida cotidiana y rápidamente se dará cuenta de que la mayoría de las veces marcan todas nuestras decisiones casi sin percatarnos. ¿Compro su coche haciendo calculos de rentabilidad? ¿Eligio su pareja porque objetivamente era la mejor opción? ¿Eligió su trabajo porque le ofrecia el mejor sueldo? La mayoría de nuestras decisiónes están tintadas (si no dominadas) por las emociones.
Ante esto hay que admitir que hay gente con un dominio de su vida emocional mucho mayor que otra. Y es curioso ver que poca correlación hay entre la Inteligencia clásica y la Inteligencia Emocional. Un caso extremo sería el típico "empollón" , que llevado al límite es una máquina intelectual pero con una vida emocional desastrosa. Por otro lado podemos encontrarnos con gente que no paso de la escuela primaria pero que llevan una vida exitosa y poseen una vida ordenada y envidiable. Estos casos extremos no son lo común, pero es necesario darse cuenta de que hay que prestar mayor atención a este tipo de habilidades que pueden marcar nuestra vida tanto o más que el C.I.
COMPONENTES DE LA INTELIGENCIA EMOCIONAL
Según Daniel Goleman los principales componentes de la inteligencia emocional son:
* Autoconocimiento emocional (o conciencia de uno mismo): Se refiere al conocimiento de nuestras propias emociones y cómo nos afectan. En muy importante conocer el modo en el que nuestro estado de ánimo influye en nuestro comportamiento, cuales son nuestras virtudes y nuestros puntos débiles. Nos sorprenderíamos al saber cuan poco sabemos de nosotros mismos.
* Autocontrol emocional (o autorregulación): El autocontrol nos permite no dejarnos llevar por los sentimientos del momento. Es saber reconocer que es pasajero en una crisis y qué perdura. Es posible que nos enfademos con nuestra pareja, pero si nos dejásemos siempre llevar por el calor del momento estaríamos continuamente actuando irresponsablemente y luego pidiendo perdón por ello.
* Automotivación: Dirigir las emociones hacia un objetivo nos permite mantener la motivación y fijar nuestra atención en las metas en lugar de en los obstáculos. En esto es necesaria cierta dosis de optimismo e iniciativa, de forma que seamos emprendedores y actuemos de forma positiva ante los contratiempos.
* Reconocimiento de emociones ajenas (o empatía): Las relaciones sociales se basan muchas veces en saber interpretar las señales que los demás emiten de forma inconsciente y que a menudo son no verbales. El reconocer las emociones ajenas, aquello que los demás sienten y que se puede expresar por la expresión de la cara, por un gesto, por una mala contestación, nos puede ayudar a establecer lazos mas reales y duraderos con las personas de nuestro entorno. No en vano, el reconocer las emociones ajenas es el primer paso para entenderlas e identificarnos con ellas.
* Relaciones interpersonales (o habilidades sociales): Cualquiera puede darse cuenta de que una buena relación con los demás es una de las cosas más importantes para nuestras vidas y para nuestro trabajo. Y no solo tratar a los que nos parece simpático, a nuestros, amigos, a nuestra familia. Sino saber tratar también exitosamente con aquellos que están en una posición superior, con nuestros jefes, con nuestros enemigos...
CONDUCTAS INTELIGENTES DE ARTHUR COSTA.Arthur costa es un psicólogo británico graduado en CALIFORNIA y fue el que se encargo de dar a saber y conocer las conductas inteligentes. Ya que muchas personas no son capaces de preguntar por el temor de pasar pena o pasar a ser un ignorante y su propósito fue tratar de lograr que todas aquellas personas con ese temor se les quitara y preguntaran.Ya que si uno no pregunta no sabe, pienso yo.-LA CREATIVIDAD:Toda ser humano posee una capacidad para crear cualquier cosa.Toda persona creativa es capaz de aceptar sus defectos y virtudes y sobre todo las criticas.-UTILIZACION DE LOS SENTIDOS:Todo ser humano debe recopilar y almacenar cualquier tipo de información a través de los sentidos el oír, ver, sentir.-PERSISTENCIA:Se define por un acto de insistir en cualquier momento o situación y además se les dice no es así y siguen insistiendo.-FLEXIBILIDAD EN EL PENSAMIENTO:Son todos aquellos que para todo lo que se le pregunte ellos contestan quizás, puede ser, tal vez, a lo mejor. Pero también aceptan cualquier tipo de idea.
ESTILOS DE APRENDIZAJES DE ALONSO HONEY.Hau varuos estilos de aprendizaje en los cuales se encuentran:*ACTIVO *TEORICO *REFLEXIVO *PRAGMATICO.*ACTIVO:Animador, arriesgado y descubridor.*TEORICO:Metódico, lodico, objetivo, critico y estructurado.*REFLEXIVO:Analítico ponderado y exhausto.*PRAGMATICO:Experimentador, practico, directo, realista y eficaz.*APRENDIXAJE PRESENCIAL:Trata de reunir nuevos canales y estudios entre estudiantes y profesores y profesores con los estudiantes.- Se entiende por activo: todos aquellos que son abiertos y se involucran en los grupos y siempre están pendientes de todo lo que hacen.- Se entiende por teórico: a todos aquellos que les gusta analizar y sintetizar.- Se entiende por pragmático: aplicarse a lo práctico y a las ideas además andan descubriendo lo positivo.

Tipos de AprendizajeExisten 4 tipos de aprendizajeActivo: Las personas que aplican este tipo de aprendizaje se involucran mucho en un tema. Son animadores arriesgados y descubridores.Reflexivo: Son analíticos, exhaustivos piensan mucho y son observadores. Reflexionan mucho sobre un tema lo analizan bien.Teórico: Son reflexioncitas les gusta sintetizar, son metódicos, objetivos, críticos, estructurados. Lo quiere decir que les gusta reflexionar sobre algo y resumirlo o hacerlo casi igual.Pragmático: Experimentador, practico, realista, y eficaz. Son seguros. Y les gusta hacer las cosas más fáciles o practicas.Aprendizaje Presencial: Son las clases en donde existe una interacción entre el docente y el alumno y trata de enriquecer la comunicación entre el alumno y el docente.Conductas inteligentesLas conductas inteligentes es la manera de actuar de los individuos ante una situación por ejemplo como reaccionamos ante un tema de matemática si nos hacemos la idea de que esta difícil o si tratamos de entender y nos metemos en la cabeza que esta fácil. O a veces también sucede a diario cuando nos encontramos ante cualquier situación reaccionamos y tenemos una conducta.Arthur Costa desarrollo esta teoría a través de la inquietud que tenia de saber como era la conducta de los seres humanos se intereso por estudiar las conductas inteligentes. Las conductas inteligentes están ligadas con el autoestima porque uno actúa depende de cómo uno se siente con uno mismo y de esa manera actuamos.Utilización de los sentidos: Nosotros los seres humanos desarrollamos algunos sentidos mejor que otros y estos los utilizamos en nuestra manera de aprender.Conocimientos Anteriormente Adquiridos: Es por ejemplo cuando uno oye un titulo o algo que nos hace recordar al pasado uno relaciona ambas cosas una canción o un libro si ya uno lo ha oído o leído antes.
EDUCAR PARA UN MUNDO INCIERTOExperto en temas de conocimiento, el norteamericano Arthur Costa sugiere claves para ayudar a las futuras generaciones en la educación para la escuela y la vida, y describe los 16 hábitos de pensamiento que despliega la gente eficaz a la hora de resolver problemas Sin duda, el mundo actual es muy complejo y esa complejidad está pidiendo nuevas formas de pensar para enfrentar desafíos cuya respuesta no se conoce. Irak, Corea del Norte, Israel, Palestina, Colombia... Desempleo, emigración, narcotráfico, violencia, secuestros... La sola mención de estas palabras despierta temor, angustia, inseguridad, desazón, terror y, por encima de todo, la convicción de estar frente a serios problemas y dilemas. ¿Pero sirve la educación actual para formar a chicos y jóvenes que deberán responder, en poco tiempo más, a una problemática global tan compleja?
Arthur L. Costa, profesor emérito de Educación en la Universidad del Estado de California, Sacramento, y codirector del Institute for Intelligent Behavior de Cameron Park, también en California, cree que no, al menos de manera generalizada. Hay diseminados por todo el mundo colegios que trabajan con teorías pedagógicas de vanguardia, que creen que la única manera de afrontar los cambios es por medio de un aprendizaje continuo, primero de directivos y docentes, y luego de padres y alumnos. Pero, a su entender, por el momento son islas.
Costa, autor de una docena de libros sobre su especialidad, trabaja desde hace 40 años en temas de conocimiento y pensamiento mirados desde la psicología y la educación. Ha sido director de programas educacionales para la NASA y desarrolló una teoría para pensar efectivamente, basada en 16 hábitos de pensamiento.
En una reciente visita a la Argentina, dictó en Buenos Aires un taller para docentes de los colegios norteamericanos de toda América latina, y brindó conferencias para padres y docentes del Florida Day School, de Vicente López, una institución que incorporó a su proceso educativo total la teoría de las inteligencias múltiples, de Howard Gardner; los trabajos de Edward De Bono y de Arthur Costa, y la enseñanza para la comprensión, que es parte del Proyecto Zero de la Universidad de Harvard, y que lidera el doctor David Perkins.
"Con estas tres perspectivas, sumadas al trabajo diario en los valores, aspiramos a preparar adecuadamente a los alumnos para los desafíos del futuro", dice Cristina Tanner, directora de la institución. Ahora bien, ¿qué está fallando en las concepciones educativas vigentes?
Costa sostiene que, mayoritariamente, lo que se privilegia es el interés en transmitir respuestas a los chicos, reglas y normas, pero lo que importa -a su entender- es brindar herramientas para buscar respuestas justamente cuando no las hay.
Su teoría se basa en el desarrollo de hábitos de pensamiento que entrenen en una forma de ver el mundo y enseñen a comportarse en tiempos en que lo que se tiene, antes que certezas, son dudas y dilemas. A lo largo de sus investigaciones, Costa detectó patrones de comportamiento que se repetían en gente influyente y exitosa. ¿Qué comportamientos utiliza la gente eficaz para resolver problemas? ¿Qué hacen los seres humanos cuando se comportan inteligentemente?
Según señala Costa, diversas investigaciones indican que los pensadores efectivos tienen comportamientos identificables. No son necesariamente científicos, artistas, matemáticos o ricos empresarios los que demuestran estos comportamientos. Estas características han sido identificadas en mecánicos, maestros, vendedores, padres y gente de todas las áreas.
"Son lo que yo llamo hábitos de la mente (ver DEBAJO), es decir, patrones de pensamiento y conductas inteligentes que se observan cuando enfrentamos problemas y dilemas de la vida", dice Costa. "Queremos que nuestros hijos desarrollen aquellos hábitos que los lleven a ser aprendices para toda la vida, que puedan resolver problemas efectivamente, tomar decisiones, ser capaces de comunicarse con un público diverso y comprender cómo vivir en un mundo altamente tecnológico y que cambia rápidamente", agrega Costa. Y explica que estos comportamientos se dan rara vez de manera aislada. Más bien se manifiestan en grupos de disposiciones.
"Escuchar atentamente, por ejemplo, implica flexibilidad, metacognición, precisión en el lenguaje y, posiblemente, cuestionar y formular preguntas -ejemplifica-. Al hablar de hábitos de pensamiento nos interesa enfocarnos en el desempeño de los alumnos en condiciones que requieren razonamiento estratégico, percepción, perseverancia, creatividad y habilidad para resolver problemas complejos." No sólo interesa entonces cuántas respuestas conoce el alumno, sino saber cómo se comporta cuando no sabe. Costa advierte que no se debe pensar que hay sólo dieciséis modos en que los humanos desplegamos nuestra inteligencia y que la lista está siempre abierta a la incorporación de atributos adicionales.
LOS 16 HÁBITOS DE LA MENTE1 persistencia 2 manejo de la impulsividad 3 capacidad de escuchar con comprensión y empatía 4 pensar flexiblemente 5 pensar en cómo pensamos 6 búsqueda de la exactitud 7 cuestionar y formular problemas 8 aplicar conocimientos anteriores a situaciones nuevas 9 pensar y comunicarse con claridad 10 recolectar datos a través de todos los sentidos 11 crear, imaginar, innovar 12 maravillarse y reaccionar con sorpresa y fascinación
13 tomar riesgos responsables 14 desarrollar el humor 15 pensar interdependientemente 16 permanecer abiertos a aprendizaje continuo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

sise copian copien bien, con introduccion y conclucion inutiles, ratas